Casi como si se tratara de un speakeasy, el encanto de Rufino se descubre en el subsuelo del hotel boutique Mío Buenos Aires de Recoleta. Esta parrilla brinda una propuesta gastronómica basada en un objetivo claro: rendir tributo a la cocina argentina moderna. Productos de primera calidad y recetas tradicionales son preparadas mediante técnicas de vanguardia que le aportan un valor agregado a platos clásicos y se combinan con una cuidada oferta de vinos y cocktails.
La experiencia comienza desde el ingreso, donde diseño, iluminación y musicalización se prestan para vivir un momento único. Al bajar unas escaleras se llega a un salón elegante y moderno. Allí, un gran sillón y una barra de cócteles enmarcada entre estantes de vinos invitan a empezar la noche con una copa. Tras pasar la recepción, se vislumbra una pared intervenida que guarda relación con la temática del menú. Con elementos en madera y hierro, el espacio se divide en sectores: desde una barra con cómodas banquetas, pasando por mesas para dos y cuatro personas hasta boxes con sillones que ofrecen mayor intimidad. Desde el interior se observa una pequeña terraza con una cascada tan distinguida como relajante que se combina con una moderna luz de neón con el nombre de la marca, lo cual genera un clima tranquilo y chic. En este entorno con detalles de sofisticación y un ambiente relajado, se degustan creaciones que enaltecen la gastronomía argentina, protagonizadas por carnes seleccionadas y vegetales de estación que son tratados con el mismo nivel de esmero.
La propuesta culinaria comienza con una serie de platitos fríos y calientes entre los que destaca el carpaccio de remolachas asadas acompañadas de ricota, gajos de naranja y eneldo, el mix de hongos a la chapa con espinacas y almendras, las empanadas fritas de asado cortado a cuchillo, de humita con verdeo y queso muzzarella o de cordero patagónico (se sirven con una salsa picante de tomates), el chorizo artesanal (con ensaladita criolla y chimichurri), la morcilla (con chucrut de repollo con pasas de arándanos, chutney de tomate y manzana) y la molleja (con puré de coliflor y chucrut de repollo colorado), entre otros.
En la sección de Principales se exhiben carnes y verduras asadas. Son protagonistas el ojo de bife con hueso (de 750 g) a la parrilla con manteca de chimichurri y ajo; la coliflor asada con yogur, hierbas frescas y alcaparras; el costillar del centro cocido a baja temperatura por seis horas; los gajos de zapallo marinados con queso provolone; el bife de chorizo con manteca de hierbas y jugo de carnes; las batatas crocantes con verdeo y vinagreta de miel; el osobuco braseado acompañado de glaseado de malbec y servido sobre puré cremoso de papa; y el morrón relleno con mix de quesos, cebolla caramelizada, pimienta y perejil. También ofrecen platos de cocina, como risotto de hongos patagónicos (de pino y portobellos) con oporto y queso reggianito; humita gratinada con queso provolone, albahaca y ají molido; y tagliatelle al huevo con salsa de hongos asados y pesto.
El final dulce se acompaña con postres tradicionales, como flan casero con dulce de leche colonial y crema de vainillas, panqueque con dulce de leche caramelizado, helado de crema americana y salsa toffee, y cremoso de chocolate con crocante de frutos secos y cristales de sal marina patagónica.
Su carta de bebidas luce vinos tradicionales y modernos que están ordenados por intensidad —de ligeros a intensos— e invitan a viajar por distintas regiones y terruños del país. Además, su coctelería de autor propone reversiones de clásicos que combinan frutas tropicales y cítricas con almíbares artesanales y gaseosas naturales. Algunos recomendados son el Pasionario (tequila José Cuervo, maracuyá, lima y Hesperidina), el Argenpisco (pisco sour tradicional con un toque de malbec) y el Rufina (ron, mix de cítricos, maracuyá, frutos rojos y soda).
Desde un subsuelo en pleno centro de Recoleta, Rufino propone una experiencia rupturista de carnes y vegetales a la parrilla mediante reversiones de platos clásicos que se trabajan con técnicas de vanguardia y representan a la cocina argentina moderna.
Rufino
Dirección: Av. Pres. Manuel Quintana 465, Subsuelo del Hotel Mío Buenos Aires, Recoleta.
Horarios: lunes a domingos desde las 19.30 h.
Reservas: reservas@rufinoargentino.com y (+54 9) 1156017547
Instagram: @rufinoarg
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